¡Tipos de mordida!
Existen varios tipos de mordida, algunos de los más comunes son:
Mordida ideal: Los dientes superiores se superponen ligeramente a los inferiores, permitiendo que las puntas de los dientes inferiores toquen la parte posterior de los dientes superiores.
Mordida abierta: Los dientes superiores e inferiores no se tocan cuando la boca está cerrada.
Mordida cruzada: Los dientes inferiores están en una posición más adelantada que los dientes superiores, o viceversa.
4. Sobremordida: Los dientes superiores cubren los dientes inferiores en exceso, lo que puede aumentar el riesgo de lesiones dentales y mandibulares.
5. Submordida: Los dientes inferiores sobresalen más allá de los dientes superiores, lo que también puede causar problemas en la mandíbula y en la salud dental en general.
Cada tipo de mordida puede tener diferentes grados de severidad y pueden afectar la salud dental y la apariencia de la sonrisa. Si tienes alguna inquietud sobre tu mordida o la de tus hijos, es importante consultar en La Merced clínica dental para una evaluación y tratamiento si es necesario.
¿Por qué es importante tener una buena mordida?
Una buena mordida, también conocida como una oclusión adecuada, es importante por varias razones:
Función adecuada de los dientes: Una buena mordida permite que los dientes superiores e inferiores se encajen correctamente, lo que facilita la masticación y la digestión de los alimentos. Si hay problemas de mordida, como una mordida cruzada o sobremordida, puede dificultar la masticación y llevar a problemas digestivos.
2. Salud bucal: Una buena mordida también puede ayudar a prevenir la caries dental y las enfermedades de las encías, ya que permite que los dientes se limpien adecuadamente. Si los dientes no se tocan correctamente, pueden acumularse alimentos y bacterias en las áreas de difícil acceso, lo que aumenta el riesgo de caries y enfermedades de las encías.
3. Salud general: Una mordida inadecuada también puede causar dolor en la mandíbula, dolores de cabeza, trastornos del sueño y otros problemas de salud. Si la mordida no es adecuada, puede ejercer una presión adicional sobre la mandíbula y los músculos de la cabeza y el cuello, lo que puede llevar a dolores y molestias.
En resumen, una buena mordida es importante porque ayuda a garantizar una función adecuada de los dientes, la salud bucal y la salud general en general. Si tiene problemas de mordida, es importante buscar tratamiento con un dentista o un ortodoncista para corregirlos y evitar problemas de salud a largo plazo.
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