
¿Las maloclusiones son congénitas?
Una maloclusión es una desalineación de los dientes que contribuye a una mala relación entre los huesos del maxilar superior. (El maxilar inferior o mandíbula con el maxilar superior).
Estas maloclusiones pueden causar muchos problemas, desde problemas estéticos de no ver una boca armoniosa y una buena sonrisa donde todo esté en perfectas proporciones, hasta cambios funcionales o dolor en la articulación de la mandíbula (ATM), dolores de cabeza y dolor de cuello y postura…

Estos cambios en la forma y función del aparato estomatognático deben corregirse lo antes posible, antes de que finalice el crecimiento, para que tengan el menor impacto posible en el resto de nuestro cuerpo.
Con todas las disfunciones, uno debe tratar de llegar a la raíz, descubrir qué las causó, qué factores pueden afectar su desarrollo posterior, empeorarlas o estabilizarlas para que el tratamiento sea más efectivo y tratar de asegurarse de que la causa no sea el fracaso del tratamiento.
Con todas las disfunciones, uno debe tratar de llegar a la raíz, descubrir qué las causó, qué factores pueden afectar su desarrollo posterior, empeorarlas o estabilizarlas para que el tratamiento sea más efectivo y tratar de asegurarse de que la causa no sea el fracaso del tratamiento.
Sabemos que la función del sistema estomatognático está íntimamente relacionada con el desarrollo de los órganos que lo componen. Algunas funciones fisiológicas contribuyen al desarrollo armonioso, mientras que algunas funciones patológicas contribuyen al desarrollo inarmónico y por tanto maloclusiones.
Las funciones principales y que más influencia tienen el en desarrollo son:la respiración, la deglución y la masticación. Y estos tres están íntimamente relacionados, sin respiración y deglución fisiológicas es imposible realizar la correcta función masticatoria y viceversa.
Pero para hablar de la causa, de la etiología del correcto desarrollo o del desarrollo alterado, tenemos que remontarnos unos minutos atrás, a los últimos meses de vida en el vientre materno y al momento del nacimiento, de ellos va a depender en gran medida nuestro desarrollo fisiológico o hacia la patología. Nuestra fisiología se desarrolla o avanza hacia la patología. El estrés de nuestros últimos momentos de vida en el útero, nuestro posicionamiento si vivimos con otra persona en un espacio cerrado… Los movimientos con los que nacemos, si necesitamos alguna ayuda, o viceversa, es un movimiento suave y respetuoso, corregirán la configuración del cráneo, corregirán la tensión muscular, lo que nos hará más biológicos o menos fisiológicos. el desarrollo y ciertas funciones del sistema estomatognático están más cerca o lejos de la enfermedad subyacente de la fisiología, en este caso la compresión inadecuada, maloclusión.
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